jueves, septiembre 29, 2005

¿SOY UN LÍDER?


En tres recipientes con agua hirviendo, coloque en uno de ellos una zanahoria; en el segundo, un huevo; en el último agregue dos o tres cucharadas de café y respete los tiempos de cocción de cada uno de los elementos colocados en el agua hirviente.
Notará que la zanahoria antes de cocinarse era rígida y dura, muy difícil de quebrar; mientras que luego de ser hervida en el agua, se transformó en un cuerpo blando y muy fácil de aplastar con un tenedor.
El huevo, que tiene una apariencia frágil y con un espíritu fluido, luego de pasar por agua hirviendo, parece no haber sufrido transformaciones; sin embargo, al romper la cáscara, podrá comprobarse que esa fluidez se endureció, al igual que su corazón o yema. El café, en cambio, tiñó el agua hirviente y hasta le dio sabor.
La adversidad, actúa en nosotros como lo hizo el "agua hirviendo" con la zanahoria, el huevo y el café.
Pregúntese qué es usted ante una determinada adversidad. ¿Es usted una persona dura, rígida, que ante la adversidad que le toca en ese momento vivir, lo convierte en un ser tan débil como una zanahoria?; ¿Es usted un individuo con mucha fluidez y aparentemente frágil que, cuando llega una situación adversa, se vuelve tan duro que sus emociones y su corazón no perciben las cosas hermosas?; o ¿Es, quizás, de aquellas pocas personas que hacen de la adversidad una oportunidad para aprender?.
El "autoliderazgo" es la condición humana del autodescubrimiento. Es descubrir y potenciar nuestras fortalezas; es aceptar y transformar nuestras debilidades, explorando las profundidades de nuestro Yo interior, donde habita la esencia del universo y sus principios.
Nos han "puesto" la idea en nuestras mentes que ser un "líder" es el terreno de unos pocos, de algunos "elegidos"; sin embargo, ¿recordamos conscientemente las muchas veces que hemos liderado situaciones en nuestras vidas con total naturalidad y desapego?. Ser líder no es algo que se nace, es algo que se aprende, y para ello es necesario tomar la decisión de hacerlo con total "determinación".
Ciertamente se dice que: "el arte de ser líder" es el "arte de ser uno mismo". El arte, en consecuencia, está relacionado con la belleza; y así como la belleza no se puede definir con facilidad, aunque se la "distingue" cuando se la contempla; así es el liderazgo de uno mismo.
Cuando uno se lidera, se auto-gobierna, se está manejando las herramientas del conocimiento de sí. Es aquel ser humano que ha decidido acompañarse a si mismo y "hacerse cargo de su propio ser". Y esa belleza interior que emana como una luz, se expande desde adentro hacia fuera, mostrando su plenitud, su simpleza y su creatividad en el "encuentro diario" con la felicidad.
Cuando tenía 3 años, mis padres y mis hermanos se contentaban cada vez que, en reuniones de amigos, me preguntaban que quería ser yo cuando sea grande. Recuerdo que siempre contestaba "quiero ser feliz"..."porque el amor es amar hasta morir"... Luego, los pasos por la vida me hicieron entender un nuevo significado de "ser feliz".
En un momento me parecía contradictorio cómo es eso de que uno desea "alcanzar la felicidad" y, a medida que avanzaba en la vida, sufría y veía que la felicidad cada vez resultaba más lejana.
Eso fue hasta que me di cuenta que la felicidad no es "una meta", sino "el camino de todos los días, del aquí y el ahora mismo". Que no es mañana, ni pasado mañana; que es mentira eso de que "no existe la felicidad, sino los momentos felices".... Y cuando me di cuenta que había respondido a mi "pregunta difícil" (¿cuando llegaré a ser feliz?) al saber que la felicidad es "el camino del HOY".
Desde ese momento sentí que planté en mi una semilla.
Transformarse en un líder, es convertir la semilla en la flor del "uno mismo", del ser auténtico, del ser con valores, del vencer los fantasmas de los miedos, del ser agradecido al universo y a su inagotable energía, fuente de nuestro equilibrio y armonía.

miércoles, septiembre 21, 2005

IMPOSSIBLE?. IMPOSSIBLE IS NOTHING.

TODO ESTÁ EN NOSOTROS,EN NUESTRA ACTITUD MENTAL.



Campaña en vía pública - Adidas


sábado, septiembre 10, 2005

SUPUESTOS CULTURALES


Leyendo un artículo desde Emol de David Fischman, connotado consultor en temas relacionados a Liderazgo y Gestión Empresarial, me vino a la memoria un acontecimiento que me sucedió. Trabajando en mis inicios como Ingeniero Mecánico para la empresa Japonesa Mitsubishi Chile, me tocó informar de manera urgente e informal una hecho importante que acontecía en el Proyecto al Gerente de Ingeniería y Construcción Sr. Toné ( hoy en Japón). Afortunadamente, me encontré con él coincidentemente en el pasillo principal de la oficina. Es la ocasión, me acerqué en actitud "made in Chile" y le informé directamente lo que llevaba en mente, sin embargo, para mi sorpresa, me responde poco menos que gritando... ¡Why you ... Hunto San ¡ ( San es Señor), tirando el casco a lo lejos, y yo, recién salido de la U. quedé impresionado y pasándome "rollos" cuál había sido el error . Después supe que, para éste caso, tendría que haber hecho una "reverencia", y ubicarme no menos de dos metros con respecto a él, y esperar que él viniera a mi persona.
Supuestos Culturales. Sin embargo, dicha experiencia laboral en términos globales marca y ha marcado mi actitud de gestión en términos de manejar la humildad sin dejar de ser fuerte y asertivo.¡ Aunque a veces tengo recaídas...

domingo, septiembre 04, 2005

EL ARGUMENTO TELEOLÓGICO DE LA EXISTENCIA DE DIOS :LEAN CON ATENCIÓN¡

El argumento teleológico o del designio es uno de los más reconocidos a favor de la existencia de Dios: el orden y diseño inteligente del universo no se explica apelando a un azar sino a un Dios ordenador y diseñador. Una de las formulaciones del argumento es la que hizo William Paley, en 1802, en Teología natural :

«Supongamos que, pasando un zarceño, mi pie tropieza con una piedra, y se me pregunta como ha llegado hasta aquí; podría contestar, dado que no tengo razones para pensar lo contrario, que siempre ha estado en este lugar; tal vez no sería fácil demostrar el absurdo de esta respuesta. Pero supongamos que hallo un reloj en el suelo, y se me pregunta qué ha sucedido para que el reloj esté en este lugar; ciertamente, no podría responder como antes diciendo que el reloj ha estado siempre en este lugar. (...) El reloj encontrado ha debido tener un fabricante: ha de existir, en algún momento y en algún lugar, un productor o productores que lo han diseñado y construido con una finalidad que muy bien sabemos. (...) La idea, el diseño que existe en un reloj, existe en todas las obras de la naturaleza; con la diferencia, por parte de éstas, de ser tan excelsas o más, y en un grado que supera todo cálculo.»

Esta argumentación utiliza a Dios como «tapagujeros», o sea, Dios explica lo que por el momento es inexplicable; pero encierra un riesgo: si se obtiene otra explicación, Dios ya no es necesario. Por otra parte, ¿no es legítimo preguntarse, a la vez, cuál es la causa de Dios?.


This page is powered by Blogger. Isn't yours?